Desde el principio Dios a tenido un propósito maravilloso con la humanidad, nos dice Gen 1:28 “…Fructificad y multiplicaos; llenar la tierra y sojuzgadla y señorear en los peces del mar, en las aves de los cielos y en todas las bestias que se mueven sobre la faz de la tierra”. Y mas adelante leemos en Génesis 2:15,18,21 “Tomó pues Jehová Dios al hombre, y los puso en el huerto de Edén, para que lo labrara y lo guardara”…”no es bueno que el hombre este solo; le haré ayuda idónea para él”…”hizo caer en sueño profundo a Adán”…”hizo una mujer, y la trajo al hombre”.
Primeramente nos damos cuenta el cuidado de Dios para con el hombre al proveerle una ayuda idónea, y dice que creo a la mujer, pero les da el mandato de multiplicarse. El deseo de Dios era una tierra llena de seres humanos en armonía y eternidad, no solamente física sino espiritualmente, El quería verdaderamente habitar en ellos.
Y a pesar de ser creación de El, nos da algo que se llama albedrío, o sea la libertad de decisión, y desafortunadamente se toma una mala, muy mala decisión.
Dios da una orden a ellos, algo muy sencillo: Génesis 2:16-17 “…de todo árbol del huerto podrás comer; más del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás”. Pero se da un problemilla por ahí, Satanás mete la mano y provoca el pecado de la primera pareja humana. Gen. 3:6.”…y tomó de su fruto y lo comió; y dio también a su marido, el cual comió así como ella”.
Ellos han desobedecido a Dios y se han dejado influenciar por la serpiente, y esto provoca una situación tremenda y un cambio de la historia muy grande. Pero no dejemos de recordar que Dios es precavido y proveedor.
Sabemos que se esto tiene consecuencias graves, se ha perdido la oportunidad de vivir una eternidad en armonía en el huerto de Edén llevando una maravillosa relación con Dios mismo.
Ellos han rechazado la dependencia de Dios y hacer su voluntad, lo que llevo al ser humano a se un ser egocéntrico, egoísta, vanidoso, injusto con sus semejantes; deseoso de solo satisfacerse así mismo, sin importarle la opinión de Dios, ni lo que pueda afectar a sus semejantes. Y podríamos tomar como ejemplo las muchas guerras que ha habido, las injusticias sociales, el hambre mundial y la indiferencia a ella, esa lucha constante del hombre contra el hombre; y así podríamos mencionar un sin fin de situaciones que se están viviendo a consecuencia de una mala decisión que se tomo desde el principio.
Sin embargo, Dios nos ha mostrado su amor una y otras vez; nos damos cuanta por ejemplo, como en el principio Dios estaba con Adán cuando lo creo y tenia comunión con el, y siguió amándolo a pesar de su desatino.
Dios quería vivir con nosotros y en nosotros, protegiéndonos, sabiendo las situaciones tan precarias que empezaría a vivir la humanidad a consecuencia del pecado.
Así que siguió proveyendo sus excelencias y se propuso recuperar a su creación, y obtener de esta manera a aquellos hijos que no pudo tener, mostrando también su Gracia y Misericordia.
Dios ha tomado la iniciativa y revela lo que vendría en provisión, leemos: Génesis 2:15 “Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú la herirás en el calcañal”.
Y la promesa de la futura venida de quien recuperaría el propósito de de Dios empieza a pasar de una generación a otra; leemos que hace un pacto con Abraham, Gen 12:1-3 “…Vete de tu tierra y tu parentela… a la tierra que te mostraré y haré de ti una gran nación y te bendeciré y engrandeceré tu nombre… y serán benditas en ti todas las familias de la tierra”.
Posteriormente este pacto es pasado a Isaac hijo de Abraham, Gen.26:1 “…y se fue Isaac a Abimelec rey de los filisteos... y se le apareció Jehová, y le dijo, no desciendas a Egipto; habita en la tierra que yo te daré… y estaré contigo, y te bendeciré; por que a ti y tu descendencia daré todas estas tierras y confirmare mi juramento que hice con Abraham tu padre. Multiplicare tu descendencia como las estrellas del cielo”.
Después se le da esta promesa a Jacob hijo de Isaac, quien llegaría a ser Israel y en un sueños Jehová se revela; Génesis 28:13 “…Yo soy Jehová… la tierra en que estas acostado te la daré a ti y a tu descendencia y será tu descendencia como el polvo de la tierra… y todas las familias de la tierra serán benditas en ti y en tu simiente. En Gen. 35:9 y 12 Dios le cambia el nombre a Jacob y reafirma su promesa de descendencia.
Posteriormente esa promesa pasa a Judá (no siendo él el primogénito), pero Dios estaba marcando la línea por donde vendría su Hijo, quien llevaría a cabo la labor de recuperar lo que Adán había permitido que se perdiera.
Y leemos en Mateo 1 la genealogía de Jesús: De Judá engendra a Fares por su nuera Tamar, (recordemos que dos de los hijos de Judá murieron y Tamar a través de un engaño a su suegro es que ella logra quedar encinta). Después viene a Esrom (hijo de Fares), Aram, Aminadab (sig.: “se ha mostrado generoso”), Naasón, llego a ser jefe de la tribu de Judá en el desierto y cuñado de Aarón, (Num. 2:3), Salmón que de Rahab, (quien ayudo a los 2 espías a escapar en Jericó) engendro a Booz (que siendo pariente del esposo de Noemí Elimelec se casa con Rut y llegan a ser los bisabuelos del Rey David) que de Ruth nace: Obed (sig. “siervo”) y abuelo de David Isaí, que de sus ocho hijos, el menor, sería del Rey David (Isaías 11:1 lo menciona como una vara del tronco de Isaí).
Rey David que de Betsabe (quien fuera esposa de Urías) nace Salomón, Rey Salomón nace: Roboam, Abías (sig. “el señor es mi padre”) quien fuera uno de los sacerdotes del templo. Asa quien fuera el 3er. rey de Judá, y reino por 41 años. Josafat se le considera como un rey bueno para Judá. Joram (sig. “Jehová es exaltado”) sacerdote del templo y de quien se dice que recorrió las ciudades en compañía de otros, llevaba el libro de la Ley para enseñar al pueblo.
Uzías que se le conoce también como “Azarías” (sig. “el Señor a ayudado”) reino por 52 años he hizo lo recto delante de Dios. Jotam, quien reinara primeramente junto a su padre Uzías ya que Uzías estaba imposibilitado debido a la impureza ritual causa de la lepra que padecía. Con Jotam continuo el reinado de prosperidad de su padre Uzías.
Acaz un rey bastante malo ya que es recordado mayormente por la idolatría y por haber pasado por fuego a sus hijos. Ezequías (sig. “Jehová es fortaleza”) limpio de toda idolatría y cosa mala que su padre Acaz había hecho, restaurando la adoración a Jehová, a este rey Dios le da 15 años mas de vida al haberse arrepentido de su orgullo estando al borde de la muerte.
Aquí veremos un contraste: Manasés quien reino por 52 años y quien tuvo el reinado mas largo de la historia de la nación de Juda, clasificado como el rey más perverso de la historia.
Luego vienen Amón, Josías, señalado como el rey mas recto de todos los reyes de Juda. Jeconías (Joaquín) (sig. “Jehová establecerá”) a el, Nabucodonosor le llevo cautivo juntamente con su casa. Salatiel, Zorobabel, Abiud, Eliaquim, Azor, Sadoc, Aquim, Eliud, Eleazar, Matan,
Jacob padre de José (esposo de María) quien finalmente sería la madre JESUS.
A través de Jesús es que Dios reestablece nuevamente su reinado, pero ya no sería solo entre los hombres, sino en los hombre, es rescatado el propósito original de Dios, que es que el hombre pueda vivir una eternidad en armonía con El.
Pero sabemos que la situación no era tan sencilla como el que simplemente Jesucristo viniera a la tierra, habría que pagarse un precio, uno muy alto que nadie mas que El podría hacer, y que nos da acceso directo a Dios y que por lo mismo hoy nosotros estamos recordando. Un privilegio que tenemos por los meritos de nuestro Señor Jesucristo.
Hemos podido estudiar muy cortamente como es que está la genealogía de Jesucristo y los principales en ello; hubo reyes muy buenos y otros verdaderamente perversos, y sin embargo Dios siguió fiel a su palabra y promesa, el pueblo se revelaba y se arrepentía tiempo después y Dios seguía siendo fiel.
Hoy nosotros nos revelamos y nos arrepentimos, y a veces parecemos niños malcriados o berrinchudos que protestamos y queremos las cosas al momento y que si no lo obtenemos nos ponemos mal y comienzan nuestras protestas, sin tomar en cuanta todo lo que paso a través de la historia para que finalmente llegara Jesús, no solamente a esta tierra, sino a nuestras vidas, teniendo la oportunidad de ser salvos a través de ese sacrificio que el hizo.
Hasta el día de hoy, El nos ha tenido en su infinita misericordia una gran paciencia, pero no perdamos de vista cual es la paga al pecado o el mal proceder
Hoy tenemos la oportunidad de recordar una vez mas el propósito de Dios para nosotros, llevado acabo a través de Jesucristo nuestro Señor, y que sin esa disposición de Jesús no podríamos llegar al Padre dice Juan 14:6 “…Yo soy el camino y la verdad y la vida; nadie viene al Padre, sino por mi”.
Pongámonos a cuentas y pidamos perdón, arrepintiéndonos de nuestros malos momentos, faltas o pecados que tengamos delante de nuestro Dios. Rompamos toda atadura, todo aquello que aún se revela y no se quiere sujetar a la voluntad de Dios.
Oremos en todo momento, confiadamente que El esta en nuestro auxilio.
Amen
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