Las situaciones adversas a tu alrededor van a arreciar, pero
Dios se valdrá de medios diversos para sacarte de en medio de ellas y ponerte
en un lugar seguro; te preservará para que sigas testificando de su Realidad
Eterna y de su Verdad Infalible hacia donde él te envíe.
¡Animo!
¡No temas!
Dios no te olvida.
El permanece pendiente de ti.
No estarás a la deriva en medio de la adversidad creciente y
amenazadora, aunque te rodee por todos lados. No estarás a la deriva aunque
todos se hayan propuesto acorralarte y destruirte; aunque agoten recursos y
estrategias, nadie te tocará. La ayuda de Dios vendrá directamente.
¡Dios te librará!
¡Intervendrá a tiempo!
Todo sucederá con una sincronía perfecta.
“Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio
en las tribulaciones. Por tanto, no temeremos, aunque la tierra sea removida, y
se traspasen los montes al corazón del mar; aunque bramen y se turben sus
aguas, y tiemblen los montes a causa de su braveza”
Salmo 46:1-3
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